RON MACURO

Saturday, June 23, 2007

Macuro

Macuro (10.650º N - 61.934º O), a pocos kilómetros de la Boca del Dragón (extensión marina de 11km de ancho que separa Venezuela de la isla de Trinidad), se encuentra sobre una ensenada al lado sur-oeste de la Península de Paria, en el estado Sucre en Venezuela.

Macuro tiene la relevancia histórica de ser el primer y único sitio en donde una de las expediciones de Cristóbal Colón pisó el propio continente Americano el 5 de agosto de 1,498. Colón y sus hombres permanecieron en la zona por varios días en contacto directo con los indígenas de la etnia Kariña que vivían en la zona. Maravillado por la majestuosidad, belleza y magia del lugar, lo llamó “Tierra de Gracia”.

Extracto de carta de Cristóbal Colón a los Reyes Católicos de España: "En la Tierra de Gracia hallé temperancia suavísima y las tierras y árboles muy verdes y tan hermosos como en abril en la huertas de Valencia; y la gente de allí de muy linda estatura y blancos más que otros que haya visto en las Indias, e los cabellos muy largos y llanos, e gente más astuta e de mayor ingenio e no cobardes".

Se estima que en Macuro había grupos humanos desde el año 2,300 a.C. Para el año 1,498 estaba habitada por la etnia Kariña, pueblo que se extendía por casi todas las islas del mar Caribe y desde la costa Nororiental de Venezuela (Macuro-Paria) hasta la desembocadura del río Amazonas. Practicaban la pesca, la cacería y la agricultura en conucos, incluso comercializaban con otras comunidades y utilizaban algunas conchas como monedas. En su primer contacto con esta etnia, Cristóbal Colón la describió como “gente bien dispuesta, de hermosa estatura y de cabellos largos y lisos”. Dieron muestra de amistad e intercambiaron objetos con los recién llegados, pero al notar las intenciones de éstos de manejar los recursos y utilizarlos como mano de obra, se convirtieron en unos de los pueblos más aguerridos que se enfrentaron a los españoles, los genéricamente llamados Caribes.

Tuesday, June 19, 2007

Notas de Oriol Serra Nadal

Nuestro gran aliado Oriol Serra Nadal, director de la empresa Serra&Silva distribuidores de Ron Macuro en Caracas y Valencia, nos deleita con el perfil que le hizo al producto algún tiempo atrás.

“Estamos ante una experiencia contemplativa, una degustación que ofrece un amplísimo discurso a medida que transcurre el tiempo en la copa. Un ron complejo que fundamenta su personalidad en su constante capacidad para sorprender.

La nariz evoluciona lentamente desde su entrada. En el viaje por la copa suaviza sus alcoholes de forma majestuosa hasta hacerse etéreo y permitir un diálogo más elevado con el infinito registro aromático que atesora. Se muestra equilibrado con los matices de la madera. Una solera que no tiene rastros de maltrato.

Nos da la bienvenida con perfumes de piel de naranja, sólo por un instante, antes de hacerse más evidente el rastro dulce de ciertos habanos y notas de cacao. En boca aparece la almendra amarga de los dulces alemanes. El cuero, aquí se viste con elegancia y la presencia del cacao más que una evidencia, es un recuerdo que se mezcla con especias en su amplia permanencia en boca.

Ron Macuro es el ron más hedonista que he encontrado en Venezuela. Creado para el deleite en privado, junto a un buen chocolate al 70% y/o un buen tabaco ligero. Posiblemente nos encontramos ante una nueva concepción en el ron que no tengo dudas que marcará tendencia.”

Aprovecho la oportunidad para hacer un reconocimiento de la loable labor que hace Oriol Serra en Venezuela por nuestros rones y por nuestros productos. Los invito a leer las siguientes notas: Manifiesto por el Ron de Venezuela y Saber más sobre el Ron de Venezuela

Sunday, June 10, 2007

Armonías insuperables en el Urrutia

Don Carlos Falcó - Marqués de Griñón - y Alberto Fariñez brindando con Ron Macuro en el Restaurante Urrutia.
Alberto Fariñez, Oriol Serra, Don Carlos Falcó, Jeannette Méndes y Maria Mercedes Nouel.

En el restaurante Urrutia de la Avenida Solano nos encontramos con un ambiente insuperable, el lugar estaba totalmente lleno entre los que había muchos amigos y caras conocidas quienes pudieron saludar y conversar con Don Carlos Falcó, el Marqués de Griñón.

El menú de degustación estaba perfectamente coordinado para el encuentro con 4 vinos: los entrantes, pimientos del piquillo rellenos de pescado y la tortilla de espinacas y camarones danzaron armoniosamente con el Summa Varietalis. Los imperdibles tacos de mero con pimientos y cama de arroz lucieron con el Syrah, muchos asistentes se sorprendieron con el maridaje del pescado con un vino tinto, no pensaban que pudiera haber una alianza tan especial. El cambio a las carnes fue igualmente exquisito, las chuletas cordero de jacura con el Petit Verdot y el chuletón de res a la vasca con el Cabernet Sauvignon.

El cierre de tan espectaculares armonías fue dictado por Ron Macuro con la famosa leche frita del Urrutia. Don Carlos disfrutó de la complejidad de aromas y sabores de Ron Macuro.